El Ayuntamiento de Barcelona regará con agua, procedente del freático, las zonas en las que se registran mayores índices de contaminación atmosférica provocada por el tráfico, y así espera reducir hasta un 10% los niveles de polución por partículas menores de diez micras, las denominadas PM10.
Noticias Troposfera.org
08/03/2009
(
Fuente:
ADN.es)
La quinta teniente de alcalde y responsable de Medio
Ambiente, Imma Mayol, ha explicado en una entrevista a Efe, que este plan se
basa en un estudio elaborado por un equipo de investigadores barcelonés que
recogen los beneficios de esta sencilla medida de riego en aquellos puntos
de la capital donde hay más polución.
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"Reducir la contaminación en un 10% con una sola medida es un objetivo muy
interesante, que además se puede poner en marcha a corto plazo", ha afirmado
la concejal de Medio Ambiente de Barcelona, una de las capitales con peores
niveles de contaminación atmosférica de España y Europa.
El tráfico es el causante del 50% de la contaminación en la ciudad, y otro
factor destacado son las obras que se realizan al aire libre y que levantan una
gran masa de polvo.
Para controlar que estas partículas no se esparzan, el consistorio ha creado
una mesa de trabajo de los agentes municipales con responsabilidades en obras,
que están elaborando un protocolo de "ambientalización" de estos proyectos.
"Son criterios que nos exigiremos a la hora de hacer estas obras que tienen
una relación directa en la contaminación", asegura la edil.
Serán normas acerca de los vehículos que se utilicen, la carga y descarga, el
almacenamiento del material, las protecciones que se utilizan para evitar que el
polvo se expanda o cómo evitar la reiteración de ciertas operaciones.
Todas estas medidas se sumarán a las 73 recogidas en el plan del Departamento
de Medio Ambiente contra la contaminación atmosférica en el área metropolitana
de Barcelona, que incluye la polémica limitación a 80 kilómetros por hora (km/h)
en las vías de acceso a la capital, y que ha permitido una disminución de la
polución de un 11% desde su entrada en vigor.
Mayol ha recordado también que en este mandato las llamadas Zonas 30, que
limitan la velocidad de circulación a 30 kilómetros por hora, se extenderán
paulatinamente por numerosas vías de la ciudad, pero ha señalado que se trata de
una medida destinada sobre todo a pacificar el tráfico y a reducir el ruido
viario.
Según la edil, una vez que reduces la velocidad de 120 ó 100 km/h a 80 ó 70
km/h, su efecto sobre la disminución de la polución "no es mucho".
La capital catalana es uno de los once municipios del área metropolitana que
en 2008 superaron los niveles de PM10 (40 microgramos por metro cúbico) y
también sobrepasa el límite permitido de dióxido de nitrógeno en el aire.
La responsable de Medio Ambiente cree que las actuaciones previstas
permitirán que los niveles de polución de Barcelona queden dentro de los
autorizados por la UE, sin que haya que adoptar planes más drásticos para evitar
la sanciones, como la polémica congestión "tax", vigente en urbes como Londres,
que se cobra a los conductores por entrar en la ciudad.
"Hoy por hoy está fuera de la negociación y, aunque no hay que sacralizar
ninguna idea y, a pesar de que esta tasa tiene muchas ventajas y ya hay otras
ciudades que se están animando, a mí me parece una medida injusta porque va
asociada al dinero: circula quien puede pagarlo", afirma Mayol.
El Ayuntamiento de Barcelona no quiere perder tampoco el tren del coche
eléctrico y sus ventajas, por el que están apostando las grandes marcas, que a
partir de 2010 pondrán modelos 100% limpios en el mercado.
Para ello, desde las áreas de Promoción Económica, Movilidad y Medio Ambiente
se está estudiando la ubicación en la ciudad de diez puntos en superficie de
carga eléctrica, ya que el principal problema que tendrán estos modelos será
encontrar lugares donde "enchufarse".
El objetivo primero será, ha dicho Mayol, definir el estándar del prototipo
de recarga, para que puedan ser "replicables y extendibles" a otros puntos de la
ciudad a medida que vaya creciendo el mercado.
Otra de las medidas que la concejal no vería con malos ojos que se aplicase,
aunque ha reconocido que no está a debate en el seno del gobierno municipal, es
un aumento de la fiscalidad para los vehículos 4x4, por su mayor efecto
contaminante.
Troposfera.org declina cualquier responsabilidad sobre el contenido de la información extraída de otras fuentes, las cuales son siempre citadas. Así mismo, su publicación no pretende reflejar la postura u opinión de Troposfera.org sobre el tema tratado.
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