Es más, se limitó a aseverar que la calidad del aire, por ley, no compete al Ayuntamiento. «Los ayuntamientos, según la ley de Bases del Régimen Local, carecen de competencias en asuntos medioambientales que están relacionados con la calidad del aire y del agua», señaló. Domínguez aclaró que «es, en todo caso, la Viceconsejería de Medio Ambiente quien tiene atribuciones en estos ámbitos». «Me consta que están trabajando ya en el análisis de los datos obtenidos», concluyó.

Esos datos a los que se refiere son los que hizo públicos el Colectivo Ecologista esta misma semana en base al balance de las estaciones de medición de contaminantes atmosféricos en 2009. Los ecologistas concluyen que la comarca avilesina volvió a liderar el año pasado el ranking de las zonas más contaminadas de Asturias y del país, en cuanto a calidad del aire, con «el grave riesgo que esos índices de contaminación ambiental suponen para la salud de la población avilesina».

Según los datos que manejan los ecologistas, en 2009 se superaron los niveles de protección a la salud de partículas en suspensión durante un total de 322 días. Sostienen, además, que se superó durante todo el año el límite de protección a la vegetación del óxido de nitrógeno, alcanzando el medidor de la plaza de la Guitarra los peores niveles. En cuanto al dióxido de azufre, según la misma versión, se superaron los límites en siete ocasiones.

Los ecologistas añadieron que Avilés es uno de los municipios españoles con mayor número de casos de cáncer debido a la contaminación industrial, según un estudio elaborado por el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III.

Carmen Vega, concejala del PP, se hizo eco de las críticas de los ecologistas y aprovechó para poner en tela de juicio la labor que Juan Domínguez desempeña en el gobierno local. «No tenemos ni idea de a qué se dedica, porque no conocemos ninguna gestión que haya realizado. Pedimos por enésima vez medidas urgentes para mejorar la calidad de nuestro aire y que se realice de una vez un plan para luchar contra la contaminación», declaró el martes la edil del PP.

El aludido, Juan Domínguez, se definió como una «persona discreta y que trabaja en silencio». Por ello se limitó a responder a Carmen Vega con una invitación en vez de con un reproche: «Sabe que estoy a su disposición para informarlo de cualquier asunto de mi competencia».

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