El presente verano es uno de los más calurosos que se recuerdan en la ciudad, o al menos así lo dicen las estadísticas del Instituto Nacional de Meteorología (INM), pero esta circunstancia no ha tenido como consecuencia un fenómeno paralelo de aumento de la contaminación por ozono. La Consejería de Medio Ambiente sólo ha registrado un caso de superación de los límites de este gas contaminante en la ciudad y sus alrededores en lo que va de verano, un dato que contrasta fuertemente con los casi doscientos casos que se contabilizaron en el año 2004, cuando Sevilla fue incluso calificada como una ciudad muy contaminada por este factor.

12/08/2006

Ampliar Noticia: Diario de Sevilla

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