El calentamiento que experimenta la Tierra se ha triplicado en los estratos medios de la atmósfera antártica, según un estudio efectuado por científicos británicos publicado hoy por la revista «Science».
Noticias Troposfera.org
31/03/2006 Según los investigadores del Instituto Antártico Británico, un nuevo estudio de observaciones realizadas mediante globos aeroestáticos durante los últimos treinta años confirma que la Antártida ha sufrido también los estragos del calentamiento global.
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Sin embargo, estos aumentos son tres veces mayores que los observados globalmente, señaló.
El estudio británico se suma a otros realizados con satélites de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) estadounidense que han señalado que la plataforma del continente helado se ha reducido debido al incremento de la temperatura ambiental.
Esa reducción ha sido paralela a una aceleración del vertido de los glaciares de Groenlandia sobre el Atlántico norte también debido al aumento de las temperaturas.
Según los científicos británicos, el rápido calentamiento sobre la superficie de la Península Antártica se conocía desde hace un tiempo, pero el nuevo estudio ha puesto al descubierto las primeras indicaciones de que el cambio climático está afectando a todo el continente.
El rápido aumento de las temperaturas superficiales de la Península Antártica y el indicio de que el calentamiento global también ha llegado al continente demuestran la complejidad del cambio climático», manifestó John Turner, director del equipo investigador del Instituto Antártico Británico.
«Los gases invernadero podrían tener un mayor impacto en la Antártida que en todo el resto del mundo y no entendemos porqué», señaló.
Turner indicó que hasta ahora no se ha logrado determinar cuáles son los mecanismos que impulsan ese mayor calentamiento.
«Podría tener implicaciones para la precipitación de nieve en toda la Antártida y para un aumento de los niveles marinos», advirtió.
Asimismo, admitió que hasta ahora las simulaciones climáticas no han logrado reproducir ese calentamiento observado, lo cual es una muestra de los problemas que existen para tener una representación fiel de los mecanismos meteorológicos en la Antártida.
«Nuestra próxima tarea será tratar de mejorar esos modelos», manifestó.
Los globos aeroestáticos han sido el instrumento preferido por los científicos para medir las condiciones atmosféricas imperantes en la Antártida desde 1957.
Esos globos lanzados desde las estaciones de investigación antártica llevan instrumentos que miden las temperaturas, la humedad y los vientos hasta una altura de unos 20 kilómetros.
Según el Instituto Antártico Británico, el análisis de esos datos ha demostrado un calentamiento durante el invierno austral en toda la troposfera hasta una altura de unos ocho kilómetros y un enfriamiento de la estratosfera superior.
El mayor calentamiento de casi tres cuartos de un grado centígrado por década se observó a una altura de unos cinco kilómetros sobre la superficie.
Ese aumento es más de tres veces superior a la media observada en todo el mundo, señaló el Instituto.
Añadió que aunque el cambio climático sobre la superficie de la Tierra ha recibido gran atención, en las últimas décadas el mayor calentamiento se ha registrado a unos cuatro o cinco kilómetros sobre la superficie con un enfriamiento paralelo en la estratosfera.
«Existen cada vez más pruebas de que los niveles de los gases invernadero se han convertido en un manto de la Tierra que atrapa el calor a los niveles inferiores y enfría las condiciones en los niveles superiores», señaló.
Las temperaturas del aire en la región de la Península Antártica han aumentado más de 2,5 grados centígrados en los últimos 50 años, cinco veces más rápidamente que la media mundial, indicó el Instituto.
Fuente: Diario de Navarra
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