El 69% de los pólenes registrados en la atmósfera de la zona metropolitana de Tenerife son alergénicos y un 29% también pueden ocasionar problemas respiratorios.
Noticias Troposfera.org
21/03/2006 Esta es una de las conclusiones del proyecto Eolo-pat sobre predicción aerobiológica de Tenerife, en el que participan la Universidad Autónoma de Barcelona, el Observatorio Atmosférico de Izaña y los laboratorios Air Liquide.
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De acuerdo con este estudio, un 59% de las esporas presentes en la atmósfera del área metropolitana de Tenerife son alergénicas y un 10%, a pesar de ser menos agresivos, también pueden afectar a personas sensibles.
El director de Air-Liquide en Canarias, Fernando Grau, señaló que conocer las mediciones de polen y esporas en la atmósfera permitirá realizar previsiones semanales sobre el índice de estas sustancias en el ambiente.
La investigadora de Botánica de la Universidad Autónoma de Barcelona Jordina Belmonte explicó que el captador esporo-polínico ha registrado unas 150 formas distintas de pólenes y esporas y, aunque en la primavera es la época donde mayor nivel se registran, algunos como los de palmera son más abundantes en verano y en otoño.
La parietaria y la ratonera, que son dos pólenes muy alergénicos, se registran durante todo el año, dijo la especialista, quién recordó que las esporas tienen valores similares durante todo el año.
El director del Observatorio Atmosférico de Izaña, Emilio Cuevas, indicó que marzo, desde el punto de vista de la calidad del aire, es el más adverso para la salud dado, entre otros factores, a que las intrusiones de aire africano que llega a Canarias contiene un mayor número de partículas y causan un enorme impacto en la población.
Además, coincide en que durante los meses de marzo y abril se producen las mayores concentraciones de polen en la atmósfera y la contaminación en la ciudad, debido a esas incursiones de aire africano con calima persistente y ausencia de vientos alisios también es mayor.
El director del Observatorio de Izaña indicó que el año pasado fue anómalo debido a que tuvo un invierno muy frío, mientras que este ha sido muy lluvioso, por lo que se prevé una primavera muy conflictiva para los alérgicos.
La alergóloga Paloma Poza destacó la importancia de conocer lo que se encuentra en el ambiente y su repercusión en la salud, ya que ello permitirá a los pacientes alérgicos tomar medidas preventivas y, desde el punto de vista sanitario ayudará a planificar las medidas terapéuticas.
Poza también auguró una primavera problemática para los alérgicos, y señaló que se pueden destapar nuevos casos de personas que hasta ahora desconocían que eran alérgicas.
La alergóloga recordó que el 12% de la población canaria es alérgica y subrayó que el medio ambiente condiciona cada vez más las alergias.
Explicó que los principales pólenes presentes en la atmósfera de Canarias están en las vacunas que se suministran a los pacientes alérgicos, aunque señaló que están apareciendo nuevos, como el procedente del olivo, que produce muchas alergias.
Al respecto, Jorgina Belmonte indicó que el olivo es uno de las plantas que más alergias producen en la Península y consideró que no es interesante que planten en las islas.
La especialista en botánica explicó que las plantas que no tienen flores y que por lo tanto polinizan en el aire son las que más problemas de alergias presentan mientras que las plantas con flores grandes son las que menos problemas de alergias dan.
Otra de las conclusiones del estudio señala que las concentraciones de pólenes y esporas registradas en Santa Cruz de Tenerife son menores que las de lugares de la Península con características medioambientales similares.
Fuente: Canarias 7
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