En un informe sobre la implementación del Plan de Acción para la Prevención y el Control de la Contaminación del Aire, la AIC dijo que aunque en general la calidad del aire en las ciudades chinas ha mejorado, la situación sigue siendo severa.

Emitido en septiembre de 2013, el Plan de Acción fue creado por el Consejo de Estado y estableció una serie de objetivos claves como la construcción de estaciones de monitoreo para las partículas PM2,5 en todas las ciudades a nivel prefectura para el año 2015 y reducir el consumo de carbono a 65 por ciento del consumo total de energía para el 2017.

La AIC señala en el informe que las partículas PM2,5, PM10, el dióxido de nitrógeno, el dióxido de azufre y otros contaminantes han bajado todos los años en todas las ciudades y que el número de días con fuerte contaminación del aire cayeron en la mayoría de las ciudades.

Pero la contaminación del aire invernal y la contaminación por ozono está surgiendo en algunas áreas, señala el informe, el cual agrega que la densidad promedio anual de las PM10 en siete regiones provinciales ha aumentado.

Beijing enfrenta un gran desafío si quiere que el objetivo de una densidad de PM2.5 promedio anual baje a 60 microgramos para el 2017. El objetivo sólo se podrá lograr a través de medidas extraordinarias, señaló el informe.

El informe sugiere reforzar el tratamiento de la contaminación en los suburbios del sur de Beijing junto con otras medidas en otoño e invierno y un control estricto de las emisiones diesel.

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