Quienes pensaban que Córdoba es una plácida ciudad con aire limpio debido a la escasez de industrias ya pueden ir cambiando de idea. Según un informe de Ecologistas en Acción elaborado en base a las mediciones realizadas por la Junta de Andalucía, Córdoba supera los límites permitidos en varias de las sustancias contaminantes que son perjudiciales para la salud humana.

Este informe, al que ha tenido acceso el Diario de Córdoba, indica que la media anual de dióxido de nitrógeno (NO2) medido en el aire de Córdoba en el 2005 es de 52 microgramos por metro cúbico, cuando el límite, por encima del cual se ve afectada la salud, está en 50 microgramos. Este dato es aún más preocupante si se tiene en cuenta que el límite permitido por la Unión Europea bajará a 40 microgramos en el 2010. Sólo Granada supera en valor medio anual, según este informe, las mediciones de dióxido de nitrógeno realizadas en Andalucía. En su caso llega hasta los 68 microgramos.

Las partículas

Pero el dióxido de nitrógeno, que procede de las emisiones provocadas por los automóviles, no es la única sustancia tóxica que se detecta en la atmósfera cordobesa. Acaso lo más preocupante es la presencia de un elevado índice de partículas en suspensión, un término que abarca un amplio espectro de sustancias orgánicas e inorgánicas, procedentes de fuentes naturales y artificiales, y que los científicos consideran el problema más severo de contaminación ambiental. El valor medio de partículas en suspensión en el 2005 en la capital cordobesa es de 54 microgramos por metro cúbico, cuando el límite hasta el cual se considera que no afecta a la salud es de 40 microgramos.

En este capítulo, según el informe de Ecologistas en Acción, sólo Bailén supera con diferencia a Córdoba, ya que su valor medio anual es de 70 microgramos de partículas en suspensión por metro cúbico de aire. El aspecto positivo, tanto en Córdoba como en Bailén, es que las partículas detectadas son las más grandes y las menos peligrosas: son las PM10, partículas "torácicas" menores de 10 microgramos, que pueden penetrar hasta las vías respiratorias bajas.

También en este caso, una de las principales fuentes de contaminación por partículas en las ciudades es el tráfico. La combustión de carburantes fósiles en los automóviles produce partículas de distinto tamaño producidas por la cenizas volátiles o por la condensación de materiales no vaporizados durante la combustión. Mientras más pequeñas son, más dentro llegan de los pulmones e incluso del torrente sanguíneo.

Y más aún

La atmósfera cordobesa también supera los límites en cuanto a ozono troposférico, un potente agente oxidante que causa irritación en los ojos, superficies mucosas y pulmones. El límite medio es de 120 microgramos por metro cúbico, un valor que no debe superarse en periodos de ocho horas (lo que se conoce como límite octohorario) más de 25 ocasiones al año. En el caso de Córdoba, durante 2005 se superó 43 veces el límite octohorario. En esta sustancia superan ampliamente a la capital cordobesa Sevilla, con 70 veces, o Mairena del Aljarafe y Valverde del Camino, ambos con 69 superaciones.

Fuente: Diario de Córdoba

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