Un informe de Ecologistas en Acción, elaborado con datos de 2004 recogidos de la Unión Europea y del propio Ministerio de Medio Ambiente, indica que las emisiones de provenientes de La Robla provocaron que en aquel año se superaran los niveles de peligrosidad para la población en 31 ocasiones.

Estos niveles, que curiosamente no son tan detectados a veces en las estaciones de medición de La Robla y sí en puntos de la capital leonesa, afectada directa de las emisiones, son más que preocupantes para Manuel Martínez, responsable de esta organización en la provincia.

Martínez señala la situación de la térmica de La Robla es «de las más graves de España y la más grave de la Comunidad», y destaca que pese a ello existe un Plan de Emergencia para aplicar en casos de peligrosidad, «pero nunca se ha activado». 'Ecologistas' señala con el dedo a la Junta, responsable de controlar las emisiones, «publicar los datos diariamente y en el caso de que observen que se superan los límites deben avisar a la población, y si el porcentaje en el que se supera supone un peligro claro para la salud, deben tomar medidas sobre el terreno». Sin embargo, también afirma Martínez que muchas veces son las propias autoridades locales las que no se muestran interesadas en analizar los datos y exigir que se cumpla la Ley: «Nunca han querido saber nada».

Pero Unión Fenosa difiere del culpa que otorgan a su central eléctrica e insiste en que en ningún momento desde su creación la fábrica ha superado el 80% de los límites legales de emisión que tienen marcados.

Antes bien, culpan a la inversión térmica, es decir, lo que queda acumulado en la atmósfera de todo tipo de emisiones contaminantes durante días y días sin lluvia, y afirman que a la superación de los ratios han ayudado por tanto otras empresas, las calefacciones domésticas, el tráfico e incluso algún incendio en verano.

Sea como sea, la contaminación existe y no cesa, nadie lo niega. Ya en el año 2002 los ecologistas denunciaron que la térmica de La Robla había superado los umbrales de emisión en 6 ocasiones y pidieron que se declararan varias localidades de la Comunidad, entre ellas La Robla, como zonas de atmósfera contaminada.

Poco después interponían una denuncia ante la Unión Europea en la que acusaban a la Junta de vulnerar la directiva medioambiental en materia de contaminación en varias térmicas, entre ellas La Robla. Esta denuncia supuso que la Comisión Europea abriera hace dos años un expediente a España por el incumplimiento de la normativa, expediente que lejos de correr la suerte de otros muchos y archivarse continúa vigente y amenazando a las autoridades.

El control de las emisiones a la atmósfera se realiza a través de las estaciones de medición, la mayoría de la Junta. Cerca de la central térmica, en el barrio de Las Eras, hay situadas varias bases y los resultados de todas ellas se publican todos los días en la web oficial de la Junta de Castilla y León.

 Fuente: El Mundo-La Crónica

Troposfera.org declina cualquier responsabilidad sobre el contenido de las noticias que reproduce de otras fuentes, las cuales, por supuesto, son siempre citadas. No obstante, todo comentario que se quiera hacer llegar sobre las mismas, es siempre bien recibido.

Imprimir

Volver

Troposfera.org declina cualquier responsabilidad sobre el contenido de la información extraída de otras fuentes, las cuales son siempre citadas. Así mismo, su publicación no pretende reflejar la postura u opinión de Troposfera.org sobre el tema tratado.