Según un estudio de la Comisión Europea, la contaminación atmosférica causa en Europa 350.000 muertes prematuras al año. En España cada año mueren por esta causa unas 16.000 personas, lo que significa diez veces más que las personas que mueren por accidentes laborales y aproximadamente unas tres veces más que las personas que mueren por accidentes de tráfico.
20/12/2005
Estas cifras han llevado al Ministerio de Medio Ambiente a elaborar un primer borrador de lo que será la nueva Ley de Protección a la Atmófera, una norma que sustituirá a la actual de 1972.
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, presentó hoy a las comunidades autónomas las líneas básicas de lo que será esa futura ley, cuyo objetivo principal será frenar los graves efectos que causa la contaminación sobre la salud y el medio ambiente.
Según subrayó Narbona en un receso de la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente, en España cada año mueren prematuramente a causa de la contaminación atmosférica unas 16.000 personas, "diez veces más que las que mueren por accidentes laborales y aproximadamente unas tres veces más que las que mueren en accidentes de tráfico".
Esto supone, añadió, "un problema social gravísimo" que obliga al Gobierno español a incorporar en la legislación los límites exigidos por las directivas europeas.
En este sentido, la titular de Medio Ambiente reconoció que el conjunto de España se aleja de la directiva de techos nacionales de emisión y que las grandes ciudades españolas presentan frecuentes incumplimientos de los niveles de calidad establecidos.
El borrador se basa en los requisitos técnicos que exigen los convenios internacionales de los que España forma parte y su objetivo es lograr una "sistematización y codificación" que evite la dispersión actual y la fragmentación que existe en virtud de diversas normas. También facilitar su cumplimiento.
Para ello, según confirmó Narbona, el texto incorporará un capítulo sancionador. En primer lugar, reforzará el marco sancionador actual que ya existe en cuanto a la contaminación que provoca la actividad industrial y que, según reconoció, "no se está cumpliendo en España".
También se estudiará establecer sanciones para las entidades locales de las que dependen otras formas más difusas de contaminación no derivadas de la actividad industrial.
"El anteproyecto está en el primer debate político con los consejeros y el punto de partida normativo es bastante caótico", aseveró Narbona. "También habrá que fortalecer el trabajo con la FEMP, porque es en las grandes ciudades españolas donde se concentran los máximos niveles de contaminación por encima de los límites europeos".
Fuente: ABC.es
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