En personas sensibles los síntomas más corrientes son irritación en los ojos, dolor de cabeza y dificultades respiratorias, por lo que se recomienda no realizar ejercicios físicos de intensidad en horas centrales del día y a evitar la exposición prolongada al aire libre a los niños, ancianos y enfermos respiratorios.
Esta fase preventiva ha sido activada tras haberse superado el valor de cien microgramos por metro cúbico al final de las mediaciones realizadas, durante tres días consecutivos cada ocho horas, en algunas de las estaciones que conforman la Red de Control de la Contaminación Atmosférica en Valladolid.
La siguiente y definitiva fase conllevaría la aplicación de medidas restrictivas sobre el tráfico rodado y que afectarían al centro histórico de la capital, han informado esta tarde fuentes municipales.
Esa decisión se adoptaría a partir de los 120 microgramos por metro cúbico o de los 180 como valor medio horario, según las mismas fuentes.
Esta situación podría repetirse durante la próxima semana en función de las temperaturas.
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