La conselleria responde así a las peticiones del Ayuntamiento de la población, en referencia a las "incidencias medioambientales" relacionadas con la polvo en suspensión. Se ha adoptado esta medida a pesar de que ya existe en el término municipal una estación de la Red Valenciana de Vigilancia y Control de la Contaminación Atmosférica, a causa de la incidencia de las actividades mineras y sus empresas auxiliares sobre el casco urbano y su entorno.
"Se trata de una primera medida dentro del plan de acción que preparamos desde el Consejo", explica el secretario autonómico de medio ambiente, Julià Álvaro, "para determinar y corregir el impacto de las explotaciones mineras". Entre la conselleria de Agricultura y Medio Ambiente y la de Economía Sostenible, están elaborando un estudio sobre la situación de las explotaciones y sus consecuencias, del que resultarán las medidas a adoptar y a exigir en cada caso.
El nuevo equipo de medición se ha colocado en la terraza del Centro de Salud y se encuentra ya en funcionamiento. Si bien los primeros resultados se obtendrán a partir de la primera semana de marzo, dada la metodología necesaria para la determinación de algunos parámetros y la evaluación de los resultados obtenidos, el período de muestreo se prolongará hasta disponer de suficiente información para emitir unos resultados definitivos.
Se trata de un captador de alto volumen, capaz de colectar 30 m3/hora, que recoge las partículas existentes en el aire ambiente durante un periodo de muestreo de 24 horas, reteniendo las partículas sobre un filtro de fibra de cuarzo. Estos filtros son remitidos al Laboratorio de Salud Publica de Valencia para su análisis, obteniéndose así el contenido promedio para cada día.
Con esta actuación se pretende determinar el contenido en partículas PM10 existente en el aire ambiente del casco urbano de Villar del Arzobispo. Junto con el contenido en partículas PM10 también se efectuarán determinaciones de las concentraciones de metales pesados, en concreto se determinará las concentraciones de plomo, cadmio, arsénico y níquel.
En cuanto a los niveles de partículas obtenidos en 2015, a falta de descontar las aportaciones debidas a intrusiones saharianas, los niveles de partículas que se detectan en la estación de Villar del Arzobispo están alejados de los valores límites establecidos en la normativa vigente en materia de calidad del aire.
Leer noticia en fuente original: elperiodic.com