El ministro ha manifestado en declaraciones a los medios que no le parece "adecuado" que se intente utilizar "ningún tipo de artilugio político" para parar el procedimiento para la construcción del almacén, del que depende el 20% de la energía eléctrica que se genera en el país.
Soria, quien aseguró ayer a Europa Press que el coste de no tener este ATC sería un aumento del 30% en la factura de la luz, aseguró que "ni hoy ni mañana" la sociedad se puede "permitir" este incremento. Además, ha vuelto a insistir en que el ATC es un equipamiento "esencial, fundamental e imprescindible" para España.
El proceso, que, tal y como recordó el ministro se puso en marcha en el año 2004 con la aprobación en el Congreso de los Diputados tanto del PP como del PSOE, depende de un informe favorable del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) que determine las características del proyecto en la ubicación elegida, que en este caso se trata de Villar de Cañas (Castilla-La Mancha).
En este sentido, el consejo ha emitido un dictamen con cuatro votos a favor y uno en contra. El voto negativo pertenece "curiosamente al consejero asignado por el PSOE", ha indicado Soria.
En esta línea, ha añadido que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero había elegido cuatro emplazamientos durante su legislatura, entre los que se encontraba el de Villar de Cañas. De esta manera, el Gobierno del PP decidió decantarse por esta ubicación y durante su mandato se han puesto en marcha los procedimientos para adquirir los terrenos y realizar los informes de seguridad.
Los residuos nucleares españoles se almacenan en Francia
En España hay 5 centrales nucleares en activo y 3 cerradas o en proceso de desmantelamiento.
De las 5 centrales en activo obtenemos energía nuclear que se utiliza, en su mayor parte, para crear electricidad. De hecho, el 20% de la electricidad que consumimos, proviene de estas centrales.
El problema surge con los residuos de uranio que son altamente tóxicos. En España, a diferencia de la mayoría de los países de nuestro entorno, no existe ningún Almacén Temporal Centralizado de estas caracteristicas.
Sí lo tienen en Francia, Reino Unido, Bélgica, Holanda, Suecia o Suiza. Por eso llevamos nuestros "residuos nucleares" a almacenes de Francia y el contrato de alquiler, nos cuestan hasta 60 mil euros al día.
De este modo España paga al año 22 millones de euros, por ese alquiler. Esto ocurre desde 1989, tras el incidente de Vandellós, en Tarragona.
En piscinas se almacenan los residuos radiactivos. Cada central nuclear española cuenta con una, y cada vez están más llenas.
El mayor dilema es que no tienen capacidad para asumir los desechos de un gran accidente.
Es lo que pasó en 1989, tras el incendio de la central de Vandellós: había que extraer los residuos generados, pero ¿a dónde llevarlos? España no cuenta con ningún almacén para residuos de alta actividad.
Se decide entonces enviarlos a Francia: hasta estas dos instalaciones de gestión de residuos nucleares al norte y al sur del país.
España se ha comprometido a hacerse cargo de los deshechos cuando por fin construya un almacén como los que ya existen en Reino Unido o Alemania. La fecha límite era 2015 y ya se ha aplazado hasta 2017, sólo entonces sabremos si España tiene que seguir pagando a un tercer país por el almacenaje de sus residuos.
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