Éste es el diagnóstico realizado en un congreso científico en Oviedo por técnicos del Instituto Geológico y Minero de España y del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas, que evaluarán todo el territorio español para determinar qué depósitos son más seguros para almacenar el dióxido de carbono.
11/10/2005
Los expertos del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) aseguran que la cuenca central asturiana es susceptible de servir de almacén de bolsas de CO2 al reunir, a priori, las características necesarias. Los técnicos están haciendo un diagnóstico del territorio español para conocer los almacenes más viables para inyectar dióxido de carbono y evitar
emisiones a la atmósfera.
Esta evaluación también se hará en Asturias, especialmente, en cuencas de carbón y territorios que dispongan de formaciones geológicas profundas de más de 800 metros, condiciones que son imprescindibles para garantizar la seguridad del almacenamiento. Así lo confirmó ayer Miguel Ángel Zapatero, jefe del proyecto del CO2 del Instituto Geológico y Minero, durante el congreso que organizó el departamento de Prospección y Explotación de la Escuela
de Minas de Oviedo para analizar las técnicas de captura.
Fuente: La Nueva España
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