Las emisiones de CO2 generadas en EEUU crecieron un 25% entre 1990 y 2003 debido al mayor número de vehículos que se han lanzado a las carreteras y a la fiebre por la compra de grandes todoterreno poco eficaces energéticamente hablando, según un estudio de la asociación ecologista Environmental Defense.
27/08/2005
El grupo de defensa del medio ambiente advirtió que a pesar de los esfuerzos de los fabricantes de automóviles por introducir vehículos más limpios desde el punto de vista de la contaminación, la industria estadounidense ha fracasado a la hora de poner freno al aumento de emisiones de gases que provocan el efecto invernadero, informa Reuters.
«Las emisiones mantienen su ritmo de crecimiento aunque existen factores que hacen pensar a la gente que se deberían haber moderado», señala el estudio del grupo.
En 2003, las emisiones de gases generadas por turismos y todoterrenos alcanzaron un máximo de 317 millones de toneladas métricas, un 25% más que en 1990, denuncia el grupo, basándose en datos oficiales del Gobierno de Estados Unidos.
Baja la eficiencia
Buena parte del incremento de emisiones registrado en los 13 años que abarca el estudio, se debe al fuerte crecimiento que ha vivido el parque automovilístico estadounidense.
Además, los conductores norteamericanos se inclinaron más que nunca desde finales de la década de los 90 por la compra de todoterrenos, con un especial interés por los denominados Sport Utility Vehicles (SUV).
Entre otras características, este tipo de automóviles presenta unos elevados ratios de consumo de combustible y con un mayor gasto de gasolina recorren menos distancia. El resultado es que la eficiencia media del parque estadounidense ha bajado.
Por su parte, los fabricantes de automóviles se defienden recordando que están poniendo todo de su parte al invertir grandes sumas de dinero en el desarrollo tecnológico y la oferta de coches menos agresivos con el medio ambiente, como son los vehículos híbridos -movidos por motor eléctrico y de gasolina- o los, aún en fase de investigación, movidos por hidrógeno o pila de combustible.
«La industria automovilística ofrece ya en el mercado un amplio abanico de vehículos muy eficientes desde el punto de vista energético, con bajos ínidices de emisiones y están a la venta ya en numerosos concesionarios», respondió la Alliance of Automobile Manufacturers (AAM), patronal que representa los intereses de los fabricantes de coches en Estados Unidos.
La mayor parte de las emisiones de gases a la atmósfera producidas en Estados Unidos son generadas por instalaciones industriales y plantas de carbón, pero el transporte por carretera es responsable de aproximadamente el 20% del total emitido.
Fuente: El Mundo
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