29/07/2005
Este grupo de países anunciaron ayer formalmente su alianza en materia de energía y lucha contra el cambio climático, en su reunión con los ministros de Exteriores de la Asociación de Países del Sudeste Asiático (ASEAN).
"Esta es una iniciativa muy importante y refleja los sentimientos que todos tenemos", dijo en Vientiane el ministro australiano del Exterior, Alexander Downer, al lanzar la Sociedad Asia-Pacífico para el Desarrollo Limpio y el Clima, que tiene como objetivo superar al Protocolo de Kioto, contra la emisión de gases de efecto invernadero.
"No se trata sólo del acceso a fuentes de energía seguras y a precios competitivos para que el desarrollo económico continúe avanzando, sino también de asegurar la atención de problemas como el cambio climático y la contaminación", señaló Downer.
"Lo vemos como un complemento, no como una alternativa a la convención marco sobre el cambio climático del Protocolo de Kioto", dijo Robert Zoellick, vicesecretario de Estado, respecto al acuerdo entre los seis países, que suman más de la mitad de la población y economía mundiales.
"Trabajaremos conjuntamente, de acuerdo con nuestras respectivas circunstancias nacionales, para crear una nueva asociación con el fin de desarrollar, utilizar y transferir tecnologías más limpias y eficientes y para responder a cuestiones como la reduccion de la polución, la seguridad energética y el cambio climático", señalan los seis países en un comunicado colectivo difundido al margen del foro regional de ASEAN.
Zoellik agregó que los países desarrollados deberán prestar atención a las naciones en vías de desarrollo: "Se debe prestar atención y escuchar a los pares de los países en vías de desarrollo para comprender cómo desarrollar los intereses mutuos si se quiere ser capaz de resolver el problema".
El ministro de Exteriores australiano subrayó que la intención del acuerdo no es restar valor al Protocolo de Kioto, del que Estados Unidos y Australia no son firmantes.
Singapur, por su parte, saludó hoy el acuerdo en Vientiane. "Cualquier esfuerzo efectivo de mejorar el problema del cambio climático global debe implicar a Estados Unidos. Vemos el liderazgo estadounidense en esta iniciativa como un desarrollo positivo", señaló la delegación de Singapur en un comunicado.
Australia acogerá el encuentro inaugural del grupo de seis países, que se celebrará en Adelaida, y al que asistirán los ministros de Medio Ambiente y Energia de los seis países firmantes, señaló Downer.
Reacción de Europa
El pacto "es coherente con nuestros esfuerzos en el ámbito del cambio climático. Se trata de un acuerdo de asociación que respalda el Protocolo de Kioto", indicó en rueda de prensa la portavoz comunitaria de Medio Ambiente, Barbara Helfferich.
La portavoz subrayó que Bruselas "saluda" e "incentiva" este tipo de iniciativas, que ponen de relieve la preocupación de la comunidad internacional por el cambio climático.
"Pensamos que complementa nuestros esfuerzos en el ámbito de la energía limpia", insistió la misma fuente, quien señaló que, al margen del Protocolo de Kioto, la UE "trabaja también en acuerdos bilaterales" con China y con varios países en vías de desarrollo para combatir el cambio climático.
Esas iniciativas complementan el Protocolo pero no pueden sustituirlo, dado que los objetivos fijados en el mismo requieren un "esfuerzo global".
"Es obvio que uno no debe excluir al otro", añadió.
El acuerdo también "está en la línea" de la declaración sobre el cambio climático emitida por los líderes de los siete países más industrializados del mundo y Rusia (G8) en la cumbre que celebraron a principios de julio, indicó la portavoz.
En esa reunión, los líderes del G8 reconocieron el "serio desafío" que representa el recalentamiento del planeta y que la creciente necesidad y uso de energía proveniente de combustibles fósiles y otras actividades humanas contribuye en gran medida al incremento de gases de efecto invernadero asociado al calentamiento de la Tierra.
La portavoz confió en que, después de 2012, exista una alianza entre los países que más contaminan en el mundo para afrontar ese problema, y destacó que los países firmantes del reciente acuerdo son responsables en conjunto de cerca del 40% de las emisiones de gases invernadero en el planeta.
Critica Ecologista
Tony Juniper, director "Amigos de la Tierra", afirmó que el hecho de que el presidente de EEUU, George W. Bush, no revelase el acuerdo en la reciente cumbre del G-8 en Gleneagles (Escocia), dedicada precisamente al cambio climático, es "una bofetada" para el primer ministro británico, Tony Blair, que ofició de anfitrión.
"Me temo que se trata de otro intento de socavar el tratado de Kioto y de un mensaje a los países en desarrollo para que compren las nuevas tecnologías estadounidenses sin preocuparse de límites ni de calendarios", agregó Juniper en su primera reacción a la noticia.
Según los firmantes, este pacto complementa el Protocolo de Kioto, creado para reducir las emisiones de gases contaminantes de la atmósfera, entre ellos el dióxido de carbono (CO2) procedente de la quema de combustibles fósiles.
"Es un complemento y no una alternativa al Protocolo de Kioto" apuntó el subsecretario norteamericano de Estado, Robert Zoellick.
Sin embargo, el ministro australiano de Medio Ambiente, Ian Campbell, no pudo ser más claro al afirmar: "Es evidente que el protocolo de Kioto no llevará al mundo adonde quiere ir. Hay que encontrar algo que funcione mejor".
Según Campbell, Kioto fracasará porque "compromete a muy pocos países, de los que la mayoría tampoco cumplirán los objetivos (de reducción de emisiones de CO2), y no tiene en cuenta el mayor problema que se nos presenta: los países emergentes".
A diferencia de ese protocolo, el acuerdo negociado por EEUU no fija, sin embargo, metas de reducción de emisiones.
El responsable británico del Medio Ambiente, Elliot Morley, se felicitó por el acuerdo y declaró a la BBC que es importante "que la gente colabore (en la tarea de combatir el cambio climático), porque es lo que se decidió justamente en Gleneagles".
El principal asesor científico del Gobierno de Londres, David King, también se felicitó del acuerdo, aunque reconoció que no sabía nada de esas negociaciones hasta ahora.
King afirmó la importancia del desarrollo de tecnologías limpias, aunque agregó que no habrá avances en la lucha contra el efecto invernadero si al mismo tiempo no se aplican límites a las emisiones de gases de los distintos países.
Fuente: Terra Actualidad/Hechos TV
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