Los datos obtenidos del estudio de calidad del aire en la zona norte de Almassora -que se corresponde con el barrio de Fátima y alrededores-, realizado por la Universitat Jaume I señalan que los niveles de partículas en suspensión PM10 superan el valor límite en el 50% de los días en que se tomaron muestras.

El equipo redactor del informe, concretamente el profesor del departamento de Ciencias Experimentales y director de la Unidad de Mineralogía, Teófilo Sanfeliu, y la licenciada en Ciencias Químicas, Susana Pallarés, expuso ayer los resultados del estudio. La evaluación, que se realiza por segundo año consecutivo, presenta una valoración de la calidad del aire en relación con las partículas sedimentables y en suspensión (PM10 y PM 2.5).

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Según señaló el concejal del PSOE Manuel Balada, desde mayo del 2003, que fue la última vez que se midieron, hasta ahora "la contaminación se ha duplicado". De este modo, si en el 2003, de las ocho mediciones que se realizaron sólo dos sobrepasaban el límite --establecido en 50 microgramos por metro cúbico al día-- "el documento que nos han presentado abarca 32 mediciones, 16 de las cuales están por encima de ese límite".

Para Balada, "han pasado tres años y la política del Ayuntamiento del PP no ha dado solución al problema, sino que ha empeorado y los números nos llevan a un aumento bárbaro de elementos contaminantes".

"NIVELES ESTÁNDAR"

Una visión distinta del informe es la que planteó el equipo de gobierno, que lo considera como una herramienta de trabajo. El concejal de Medio Ambiente, Enrique Brisach, señaló que la calidad del aire se corresponde "con el estándar del tipo de industria del espacio en el que estamos". Pese a ello "se tienen que arbitrar fórmulas para mejorarlo", dijo. Por su parte, el alcalde, Vicente Casanova, señaló que estos valores pueden estar producidos por la entrada de vientos del Sahara o por el tráfico.

El informe también detecta gran cantidad de partículas de vidrio procedentes de una empresa cercana a la zona de medición. Al respecto, Casanova señaló que, tras las denuncias de los vecinos de Fátima, se tuvo una reunión con la firma "y acordamos que dentro de este mes nos presentarán el proyecto para cubrir el patio donde está almacenado el vidrio".

Por su parte, el edil del Bloc, Xavier Trenco, planteó que se deberían calificar los elementos asociados a fritas y esmalteras.

Brisach y el alcalde explicaron que en junio celebrarán una reunión con los responsables de las industrias locales "para darles a conocer el informe y pedirles su colaboración para controlar sus emisiones". Asimismo, "comenzará una línea de inspecciones a las empresas para ver qué medidas correctoras deben tomar", dijo Casanova.

Fuente: El Periódico Mediterráneo

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