Para tratar de eliminar esta boina gris, su Ayuntamiento -gobernado por el PSOE- está ultimando la elaborando de un protocolo de actuación ante episodios de alta polución atmosférica con el que quiere «cumplir las normas», pero también «adoptar un modelo de cambio de cultura en la movilidad urbana y en la forma de planificar y hacer ciudad». El texto está en fase de borrador y se podrán presentar alegaciones hasta el 15 de septiembre.

Ubicado en el Corredor del Henares, al este de la región, Coslada se encuentra a sólo 14 kilómetros de la Puerta del Sol y a 10 del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas. Además, alberga el mayor centro logístico del sur de Europa, con una superficie de un millón de metros cuadrados y más de 100 empresas que distribuyen desde allí sus productos, otra de las razones que explican sus elevados registros de contaminación derivada fundamentalmente del tráfico rodado.

En 2016 y 2017, este municipio de 84.000 habitantes alcanzó una media anual de NO2 de 47 mg/m3, siete décimas más del máximo permitido, fijado en un 40 mg/m3. En el primer trimestre de 2018, el último del que de momento hay estadísticas oficiales, la cifra media descendió sensiblemente hasta 44 mg/m3, pero aun así sigue suponiendo un incumplimiento de la normativa en vigor.

Desde la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid explican que, con los datos disponibles desde el 1 de enero hasta el 11 de julio, todos los contaminantes con la excepción el ozono se ajustan a «la estricta legislación nacional y europea». «Es bastante probable que a final de año las 23 estaciones [de la red regional de medición de la calidad atmosférica] cumplan, incluido el valor límite de NO2», apostillan.

Además de Coslada, en 2017 superaron los niveles de contaminación permitidos Getafe y Leganés. El resto de municipios se mantuvieron dentro de los márgenes autorizados, si bien donde se respiró el aire más puro fue en El Atazar, Orusco de Tajuña y San Martín de Valdeiglesias, cada uno de ellos situado en un punto cardinal de la región.

Incumplimientos en la capital

En este ranking no está incluido Madrid capital, que tiene su propia red de vigilancia de la contaminación. De las 24 estaciones que la componen, un total de 15 registraron el año pasado un valor medio anual de NO2 superior al límite permitido de 40 ug/m3, a saber: Escuelas Aguirre (entre la calle Alcalá y O'Donnell), Plaza Elíptica, Plaza de España, Plaza del Carmen, Villaverde, Urbanización Embajada (Barajas), Ramón y Cajal, Cuatro Caminos, Barrio del Pilar, Méndez Álvaro, Moratalaz, Arturo Soria, Vallecas, Farolillo (Carabanchel) y Plaza de Castilla.

En la Consejería de Medio Ambiente señalan que actualmente se está revisando la Estrategia de Calidad del Aire y Cambio Climático de la Comunidad de Madrid 2013-2020 y las medidas incluidas en el denominado Plan Azul+ para «garantizar el cumplimiento íntegro de la normativa» en un plazo de dos años. Además, recuerda que todas las localidades de la región de más de 75.000 habitantes deben elaborar protocolos de actuación ante picos de polución.

«Siendo esto positivo, entendemos que el Gobierno regional [del PP] debería asimismo diseñar y coordinar actuaciones supramunicipales y regionales para evitar estos episodios porque la contaminación y sus efectos no entienden de términos municipales», contrapone la concejala de Medio Ambiente de Coslada, Charo Arroyo. «Nuestro borrador va más allá de lo que se nos pide porque lo que perseguimos no es actuar únicamente cuando se produzca un episodio de alta contaminación y adoptar las medidas oportunas, sino insistir en la necesidad de la prevención», subraya la edil socialista.

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