Una tormenta de arena afectó a la capital china, cubriendo casas, calles y coches con un polvo marrón y tiñendo el cielo de amarillo mientras la ciudad sufre su peor nivel de contaminación desde hace años y con los Juegos Olímpicos 2008 a la vista. Las autoridades de Pekín recurrirán a la lluvia artificial para limpiar la ciudad.
Noticias Troposfera.org
18/04/2006 La tormenta llegó a la zona de la frontera con Mongolia durante el fin de semana y se desplazó hacia el sureste, llegando a la capital el lunes en la mañana, explicó AP.
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Habitantes de la ciudad quitaron el polvo de vehículos, edificios y monumentos. Aunque el clima permaneció en calma, los meteorólogos vaticinaron leves lloviznas.
El domingo, los trabajadores municipales salieron a lavar las calles y los sitios en construcción debieron interrumpir sus tareas para disminuir el impacto de la tormenta, indicó la agencia de noticias Xinhua.
La desertificación del oeste del país y la estepa de Mongolia ha empeorado las tormentas de arena de la primavera en los últimos años, llegando tan lejos como Corea del Sur y Japón. Además, la ciudad presenta un exceso de construcciones, y el clima frío y ventoso no ayudan, según Reuters.
Fuente: 26Noticias
En 2006, Pekín ha registrado 13 días del peor nivel de contaminación, el punto más alto en seis años, informaron distintos medios estatales.
Sólo se han registrado 53 días de "cielo azul" en 2006 hasta el pasado miércoles. La ciudad se ha establecido un objetivo de unos 230 días limpios para contribuir a lo que denomina que serán unas "Olimpíadas verdes".
Los hospitales también tienen que lidiar con un marcado incremento en el número de pacientes con enfermedades respiratorias. Con la llegada de la tormenta de arena, los diarios locales advirtieron a los residentes que llevaran máscaras.
Fabricarán lluvia para limpiar la ciudad
Las autoridades de Pekín recurrirán a la lluvia artificial para limpiar la ciudad de la capa amarillenta que la cubre, informó hoy la televisión oficial “CCTV”.
El canal estatal aseguró que la Oficina Central de Meteorología se prepara para “bombardear” las nubes sobre Pekín con yoduro de plata y otras sustancias para que reaccionen con el vapor, hagan llover y despejen la ciudad de su manto amarillo.
La tormenta de arena plantea un grave problema a las autoridades pequinesas, que ven cómo sus promesas de una ciudad “verde” de cara a los Juegos Olímpicos del 2008 quedan en entredicho debido a la polución y la desertización.
El Ayuntamiento pequinés ha prometido que “bombardeará” las nubes en los días previos al comienzo de los Juegos para garantizar que no llueva durante la ceremonia de apertura de la cita deportiva, el 8 de agosto del 2008.
El “bombardeo” de nubes para causar la lluvia artificial, con cañones o desde aviones, se utiliza ampliamente en China tanto en tiempos de sequía como para intentar ayudar en la extinción de incendios, aunque no siempre se logran los resultados esperados.
En el verano del 2005 se atribuyó al “bombardeo de nubes” las fuertes granizadas que cayeron sobre Pekín y que generaron cuantiosos daños materiales en la ciudad.
El centro de las tormentas de arena de esta semana se encuentra en la frontera chino-mongola, pero afecta a un radio de cientos de kilómetros a la redonda e incluso se han reportado aumentos de la concentración de arena en el aire en el norte y oeste de Japón.
Las autoridades pequinesas han recomendado que se evite salir a la calle, sobre todo a personas con problemas respiratorios, ancianos y niños, ya que la contaminación ha alcanzado el nivel 5, el máximo, y las consultas médicas han aumentado un 20 por ciento.
Fuente: 26Noticias/El Economista
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