Este sábado el ojo de Irma golpeó con fuerza la costa norte de Cuba. Según el Centro Nacional de Huracanes, la tormenta perdió algo de fuerza en la isla, provocando vientos sostenidos de 215 kilómetros por hora (en el Caribe llegó a alcanzar los 295 kilómetros por hora).

El último informe del centro indica que el huracán ha pasado de categoría cuatro a tres y que se alcanzarán vientos de 125 kilómetros por hora mientras se aproxima a los cayos de Florida este domingo. El monstruoso tamaño de la tormenta que se aprecia en las fotografías satelitales indica que los efectos de Irma se dejarán sentir en todo el estado.

El gobernador del estado, Rick Scott, volvió a insistir a los residentes que estén en zonas de evacuación que se vayan a un lugar seguro. "Se está haciendo tarde", advertía en la cadena NBC. Con órdenes de evacuación que afectan a 5,6 millones de residentes del estado -una tercio de la población total de Florida-, el gobernador apuntó que aquellos que no estuviesen en carretera a mediodía dejando la ciudad "necesitan encontrar un albergue". Las autoridades locales han habilitado al menos 40 en la zona de Miami-Dade, una de las que se pronostica sufrirá la virulencia del huracán.

Irma es una tormenta, añadió Scott, "increíblemente masiva y destructiva". Desde hace unos días, el gobernador repite que es mucho peor que Andrews, el huracán que arrasó Florida en 1992. Muchos vecinos del estado han dejado sus casas en busca de un refugio seguro en las últimas horas.

No obstante, no ha sido tarea fácil para quienes lo han hecho en coche por las largas colas en las gasolineras -que han sufrido cortes en el suministro- y los atascos en las vías de evacuación. También en los aeropuertos se han formado largas colas para abandonar la zona. Aeropuertos como el de Jacksonville o el de Tampa dejarán de operar vuelos a las siete y ocho de la tarde, respectivamente.

Según informó la Casa Blanca, el presidente Donald Trump seguirá el devenir de Irma desde Camp Davis en compañía de su gabinete y sus esposas. "Será un fin de semana de trabajo", subrayó la portavoz Sarah Sanders que contabilizó este encuentro como la cuarta reunión del gabinete del presidente.

"El presidente hablará de las prioridades de su administración", explicó la portavoz, además de recibir las últimas informaciones sobre Irma y los trabajos de recuperación en las zonas golpeadas por Harvey.

Trump firmó este viernes en la casa de campo presidencial el decreto aprobado por el Congreso con un paquete de 15.000 millones de dólares para la asistencia en desastres como el huracán Harvey que golpeó Texas y Lousiana hace poco más de 10 días.

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