La medida abarca las regiones de Bio Bio, Valparaíso y Región Metropolitana, incluida la capital chilena que todos los inviernos soporta altos niveles de contaminación del aire afectando a la salud de la población, en especial de niños y ancianos.

La medida “tiene una duración de 60 días, tiene que ver con (ampliar) la dotación de personal y bienes que pueden ser adquiridos por la red asistencial, para cumplir con las necesidades de la población” , dijo la ministra de Salud, Carmen Castillo.

Asimismo, la declaración de alerta permite desplegar una estrategia asistencial que incluye el aumento de camas disponibles en la red de centros de salud públicos que en invierno quedan habitualmente al borde del colapso, debido al aumento de pacientes afectados de patologías respiratorias.

En lo que va del invierno, el 45% de las consultas de emergencias se deben a problemas respiratorios, informaron las autoridades sanitarias.

Con más de 10 preemergencias ambientales y una emergencia en lo que va del año en Santiago y decenas de estas alertas en el sur del país, Chile enfrenta cada invierno el azote de la polución.

En especial, Santiago sufre altas concentraciones de contaminación en el aire debido a su condición geográfica, un valle enclavado entre cerros y la imponente Cordillera de los Andes.

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