TROPOSFERA SOLUCIONES SOSTENIBLES, S.L.

TroposferaTROPOSFERA ofrece desde 2010 una consultoría integral de medio ambiente.

Para ello cuenta con un equipo multidisciplinar de profesionales de la consultoría ambiental con más de 15 años de experiencia, tanto en el sector público como en el privado. En nuestro catálogo figuran, entre otros, los siguientes servicios:

Estudios Ambientales

Responsabilidad Ambiental ; Sistemas de Calidad ; Eficiencia Energética ; Medio Natural; AAI's ; Agendas 21 ; SIG

Contaminación Atmosférica

Mediciones de SO2, NOx, O3, COV's ... ; Modelos de dispersión (ISC, CALPUFF,...) ; Modelos Predictivos ; Meteorología; Olores ; Emisiones ; Huella de Carbono

Aguas (+ info)

Residuos (+ info)

Dispone de más información en www.troposfera.es

+ Info
Troposfera.org - Medio Ambiente, contaminación atmosférica y calidad del aire.

feb 23, 2016

Intrusiones de polvo del Sahara ¿Cómo nos afectan?


Las nubes de polvo saharianas pueden avanzar miles de kilómetros y afectar a España, Portugal y Reino Unido, o bien atravesar el Atlántico y llegar al mar Caribe y los países de la zona, como Puerto Rico o Cuba. En las Islas Canarias se las conoce como calima, y son las islas más cercanas al continente africano, Lanzarote y Fuerteventura, las más afectadas.

Las intrusiones de polvo duran entre dos y siete días, y su llegada a la Península es más frecuente en primavera y verano. El pasado mes de abril se produjeron "lluvias de barro" en Cataluña (se estima que cayeron unas 50.000 toneladas de polvo sahariano) y en las islas británicas los medios registraron impactantes imágenes y videos de coches polvorientos y cielos enturbiados.

Los suelos rojizos, ricos en mineral de hierro, generan polvo de ese color, que tiñen el cielo y dan lugar a las conocidas como "lluvias de sangre". Algunos estudios recientes apuntan a que la frecuencia de este tipo de fenómenos está aumentando en la península ibérica y Canarias como consecuencia de la mayor llegada de polvo en suspensión procedente del Sahara, explica el meteorólogo José Miguel Viñas.

Las nubes de polvo del Sahara tienen varias consecuencias negativas para el medio ambiente y la salud de quienes las padecen:

  • Empeoran los efectos de la contaminación del aire urbano: influyen en la superación del valor límite diario legal de PM 10, uno de los peores agentes contaminantes del aire en las ciudades, junto al PM 2,5.
  • Incrementan las sequías: la humedad del ambiente y la formación de nubes se reducen.
  • Arrastran minerales y sustancias potencialmente perjudiciales: la salinidad de los suelos aumenta, al igual que las mareas rojas, y se acelera el proceso de desaparición de los corales en las islas del Caribe, asegura la NASA.

Las finas partículas de polvo pueden provocar problemas respiratorios, picor o ardor en los ojos, y empeorar la situación de personas con asma. Asimismo, las bacterias, esporas de hongos y granos de polen presentes entre las partículas de polvo se han identificado como posibles causantes de enfermedades.

¿Qué son las nubes de polvo del Sahara?

Las tormentas de polvo se diferencian de las de arena por el tamaño de las partículas. En el primer caso, es menor de 100 micras (millonésima parte de un metro). Como son tan ligeras, pueden elevarse a una altura de cinco a siete kilómetros y formar una masa de aire caliente que puede llegar a miles de kilómetros de distancia en función de los vientos. El norte de África genera más del 70% de las emisiones de polvo mundiales, según un estudio publicado en la revista Atmospheric Chemistry and Physics.

Las nubes de polvo también tienen efectos ambientales positivos:

  • Los sedimentos que arrastran actúan como fertilizantes. El polvo de la depresión Bodélé, una zona que en su día fue un inmenso lago en Chad, suministra nutrientes en el Amazonas, según un artículo publicado en Nature. Además de enriquecer tierras secas, ayuda a sostener la vida en extensas zonas del océano Atlántico Norte.
  • Reducen las posibilidades de formación de huracanes y ciclones tropicales, ya que el polvo puede bloquear la luz del sol que llega a la superficie del mar, y dichos fenómenos dependen del calor de las aguas.

El polvo del Sáhara agrava los efectos de la contaminación en la salud

Los vientos procedentes de los desiertos del Sáhara y del Sahel transportan episódicamente grandes cantidades de polvo hacia Europa y otros lugares del mundo, que llegan en forma de partículas en suspensión. El objetivo del estudio, publicado en la revista 'Epidemiology' en 2008, fue investigar si estas partículas en suspensión en Barcelona se añadían a la contaminación producida por la actividad humana y podían producir efectos nocivos adicionales para la salud.

Las partículas en suspensión (PM) se clasifican según su tamaño. Las PM gruesas, las más grandes, miden de 2,5 a 10 micrómetros (de 25 a 100 veces más pequeñas que un cabello humano) y son normalmente de origen natural como las que vienen del desierto. Las partículas finas, las más pequeñas, son las llamadas PM2.5, de menos de 2,5 micrómetros, la presencia de las cuales se atribuye principalmente a procesos de combustión del tráfico rodado.

La hipótesis de salida del estudio fue observar la relación existente entre la mortalidad de los habitantes de Barcelona y los efectos a la exposición de partículas gruesas y finas, en el período comprendido entre marzo de 2003 y diciembre de 2004, comparando los efectos durante los días con y sin viento del Sáhara.

Según el director del estudio, Jordi Sunyer, "las partículas gruesas, al ser inhaladas, se depositan en los conductos bronquiales y pueden ser responsables de empeoramientos en casos de asma, enfermedad respiratoria obstructiva crónica, neumonía y otras infecciones de las vías aéreas". Por contra, explicó, "las partículas finas se depositan en los alvéolos y pueden colaborar en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares".

Los investigadores obtuvieron información vía satélite del recorrido de las masas de aire procedentes del Sáhara y, en paralelo, hicieron el seguimiento de las muertes diarias en Barcelona, un total de 24.850 decesos ocurridos dentro del período de estudio.

Las muertes pusieron de manifiesto que, coincidiendo con la presencia en el aire respirable de polvo procedente del Sáhara, se produjo a diario y en la ciudad de Barcelona, un incremento de la mortalidad del 8,4 por ciento por cada incremento en las PM gruesas en comparación al 1,4 por ciento que se registraba durante los días libres de viento procedente del norte de África.

Un aumento en la tasa de mortalidad que los investigadores atribuyen al aumento en el aire de partículas gruesas. El aumento de la mortalidad por lo que se refiere a las PM finas era el mismo los días con o sin polvo del Sáhara, lo que coincide con el hecho de que estas son de origen local y en gran parte motivadas por el tráfico.

Este trabajo pone por primera vez de manifiesto y de manera explícita, el peligro para la salud que hay asociado al incremento de partículas gruesas procedentes de algunos procesos naturales como el polvo de los desiertos.

La posibilidad de que el polvo procedente del Sáhara contenga irritantes o alergenos adicionales ya ha sido validada por otros estudios, que también han demostrado que contiene altos niveles de microbios y hongos. En cambio, no parece que los niveles de metales que contiene este polvo sean los responsables de este aumento de mortalidad, sino más bien los factores biogénicos que transportan las partículas más grandes.

Además pueden haber otros elementos químicos responsables de este efecto, como pesticidas o subproductos industriales, también transportados por el polvo sahariano, que no están medidos en este estudio.

La nube de polvo sahariano dispara la contaminación del aire por partículas en toda España

Desde el pasado domingo, una importante advección polvo de origen sahariano impulsado por fuertes vientos del Sudeste, ha disparado las concentraciones en el aire de partículas menores de 10 micras (PM10), hasta alcanzar ayer niveles que, según advertían hoy desde Ecologistas en Acción, sextuplican el límite establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La práctica totalidad de las estaciones del centro, sur y este peninsular han superado, dice en un comunicado la organización conservacionista, «el valor límite diario, establecido para este contaminante por la normativa en 50 microgramos por metro cúbico, habiéndose alcanzado los niveles urbanos más elevados en las ciudades de Málaga (374), Sevilla (353), Huelva y Cádiz (327), Soria (321), Guadalajara (319) y Granada (302)».

En Barcelona, continúa detallando Ecologistas en Acción, se alcanzó el lunes una concentración de 73 μg/m3 de partículas PM10 en la estación de Gracià y en Madrid 270 μg/m3 en la estación de la Plaza de Castilla. Alicante (72), Burgos (230), Córdoba (232), Murcia (89), Valencia (65), Valladolid (132) y Zaragoza (111) También superaron con creces el límite legal.

En las grandes ciudades, esta contaminación «natural» se está sumando a la provocada por el tráfico y las industrias que utilizan combustibles sucios (centrales térmicas de carbón o cementeras) «sin que -denuncia Ecologistas- se estén adoptando medidas de limitación del tráfico urbano».

Efecto acumulativo

La Sociedad andaluza de Alergología e Inmunología Clínica, informa Efe, ha alertado hoy de que «esta nube tiene un efecto irritativo sobre los ojos y las vías respiratorios, y conforme pasen los días y se depositen los granos se notará más». Por ello, la presidenta de la asociación, María José Giménez, ha enfatizado que no se abandone el tratamiento, «ya que a veces se cae en la tentación de dejar la medicación, porque las personas se encuentran mejor y creen que no es necesario, pero no se debe hacer por muy bien que se encuentren en los días previos a llegar una calima, ya que tiene el efecto parecido a cuando se acumulan varios días de contaminación», ha explicado.

La contaminación atmosférica es responsable de alrededor de treinta mil fallecimientos prematuros anuales en España, 25.000 por inhalación de partículas, según el último informe sobre la calidad del aire publicado por la Agencia Europea de Medio Ambiente, sobre la base de las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Leer noticia en fuente original: consumer.es | troposfera.org | abc.es



Bitacoras.com del.icio.us digg stumbleupon buzzup BlinkList mixx myspace linkedin facebook reddit.com ma.gnolia.com newsvine.com furl.net google yahoo technorati.com




Troposfera.org declina cualquier responsabilidad sobre el contenido de la información extraída de otras fuentes, las cuales son siempre citadas. Así mismo, su publicación no pretende reflejar la postura u opinión de Troposfera.org sobre el tema tratado.




© Troposfera.org. Desde 2005.
troposfera@troposfera.org · 0034 881.25.80.26 / 0034 664.31.62.48 / 0034 664.31.62.52
Real, 217- Bajo ; 15401 - Ferrol (A Coruña). España.