Ecologistas en Acción ha puesto en duda que el impuesto sobre la emisión de dióxido de carbono (CO2) de los vehículos de tracción mecánica sea una medida que sirva para una movilidad sostenible.

Esta propuesta "no se aplica a las emisiones de dióxido de nitrógeno (NO2) y partículas que contaminan nuestras ciudades, ni tampoco a emisiones industriales y marítimas u otros gases que afectan al cambio climático y la calidad del aire", ha denunciado la organización.

Por otro lado, los ecologistas han criticado que la ley pretende destinar los recursos obtenidos de estos impuestos a la compra de coches en lugar de destinarlos al Fondo Climático para financiar las medidas de adaptación y mitigación, especialmente los planes de movilidad activa (peatón y bicicleta) y el transporte público.

Por este motivo, según los ecologistas, esta ley tendría que lograr objetivos "más ambiciosos", como la reducción de los gases con efecto invernadero de al menos el 40% en 2020 y el 95% en 2050, o la retirada del comercio de derechos de emisión, que "beneficia a las grandes corporaciones y la especulación financiera".

Ecologistas en Acción también ha propuesto dejar de subvencionar los combustibles fósiles y nucleares y establecer un sistema de tributos que penalice su uso para dirigirse hacia un futuro con energía 100% renovable.

Finalmente, la organización ha exigido que la evaluación de las políticas climáticas que propone la ley sea vinculante y que cuente con una amplia participación de diferentes grupos de expertos y de la sociedad civil.

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