Muchos habitantes valoraban positivamente una medida que las autoridades locales podrían retomar de forma prolongada.

"La circulación en Delhi mejoró mucho. Antes tardaba casi una hora entre mi trabajo y mi casa, y ahora sólo tardo media hora. Es un alivio", dijo Rohit Srivastava, un empleado de banco de 32 años.

Para Tej Bahadur Patel, un conductor de rickshaw -el tradicional coche de dos ruedas desplazado por tracción humana-, la menor circulación ha sido un alivio para los pulmones. "Menos automóviles significan menos atascos, lo que permite respirar menos contaminación", aseguró este hombre de 38 años.

La calidad del aire seguía sin embargo siendo "muy mala" este viernes, según las mediciones de la embajada estadounidense.

Parece que la mayoría de los conductores acataron la prohibición de utilizar sus coches uno de cada dos días en la capital india, donde nadie respeta las normas de circulación. La multa impuesta por las autoridades en caso de infracción era de 2.000 rupias (24 euros, 29 dólares), una cantidad importante para la mayoría de los habitantes.

Las autoridades locales aseguraron que la experiencia "redujo en más del 50% la contaminación del aire provocada por la circulación de los automóviles" en los 18 puntos de control del aire.

Pero la contaminación alcanzaba este viernes una densidad de 156 partículas finas por metro cúbico de aire, menos que en el primer día del ensayo, pero seis veces más que el umbral recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Esas partículas se instalan en los pulmones y pueden entrar en el sistema sanguíneo, provocando bronquitis crónicas, cánceres de pulmón y enfermedad cardíacas.

La experiencia de la circulación alternada se decidió a finales de diciembre, a raíz de una decisión de la justicia que obligó a las autoridades a actuar en una capital donde la contaminación llega a alcanzar 10 veces los límites de la OMS.

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