Categories: Noticias Ambientales
      Date: nov  1, 2005
     Title: El Ebro verá reducido su caudal hasta un 15% por cambio climático
En 50 años el cambio climático provocará que "los recursos hídricos en la cuenca del Ebro pueden disminuir entre el 5% y el 15%, según los distintos escenarios considerados", señala un estudio de la Universidad Politécnica de Madrid.

01/11/2005

Un documento de la Oficina de Planificación de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) indica que "la conclusión general" de los investigadores es que "para la cuenca del Ebro puede esperarse una disminución en los caudales de los ríos del orden del 10%".

Diferentes estudios científicos prevén para los próximos años un aumento de la temperatura de hasta cinco grados, según el mes, y un incremento invernal de las precipitaciones, que se reducirán en otoño y primavera.

Otro efecto del cambio climático empieza a afectar a los sistemas fluviales: el aumento de la evapotranspiración, una función biológica en la que las plantas captan el agua del subsuelo y la envían a la atmósfera a través de sus hojas. La Evaluación preliminar de los impactos en España por efecto del cambio climático , elaborado por la Universidad de Castilla-La Mancha con la colaboración de medio centenar de expertos, advierte de que este fenómeno, favorecido por la elevación de las temperaturas, "tendrá como consecuencia el descenso de los caudales" y anota que sus consecuencias serán más perceptibles "en los tramos de recepción", es decir, en los cauces que reciben la aportación de afluentes.

La evapotranspiración ha aumentado más de un 20% en Aragón en los últimos diez años, según los datos del Instituto Nacional de Meteorología, lo que ha conllevado la exclusión del ciclo fluvial de grandes volúmenes de agua, que pasan directamente del subsuelo a la atmósfera en lugar de alimentar los acuíferos.

Paralelamente, este fenómeno eleva la demanda de agua para la agricultura, ya que aumenta la sequedad de los suelos cultivados.

En el año agrícola 1996-97, los valores de la evapotranspiración registrados por las estaciones meteorológicas aragonesas oscilaban entre los 827 litros por metro cuadrado de Monflorite y los 953 de Zaragoza, mientras que en el ejercicio cerrado hace dos meses los valores estaban en una horquilla de 1.106 a 1.297.

En esa década, una hectárea ha pasado de enviar a la atmósfera entre 8.000 y 9.000 metros cúbicos anuales --un volumen similar a las dotaciones-objetivo de los regadíos-- a sublimar de 10.000 a 13.000.

Con los niveles más bajos de este fenómeno --Teruel, 1041,7 litros por metro cuadrado-- tanto la superficie cultivada en la cuenca del Ebro --750.000 hectáreas-- como la forestal --7.600 kilómetros cuadrados-- habrían remitido a la atmósfera entre 7.800 y 7.900 hectómetros cúbicos: más de un 15% por encima del caudal que este año ha llevado el Ebro en Tortosa, 6.699 hectómetros.

Los observatorios meteorológicos aragoneses con valores más bajos de evapotranspiración son Teruel, con 1.041 litros por metro cuadrado y un aumento de 169 en diez años, y Monflorite, con 1.106 y 279. Calamocha y Daroca ofrecen niveles intermedios, con registros de 1.118 y 1.141 e incrementos de 153 y 231. En Zaragoza, con una subida de 354 litros por metro cuadrado en diez años, se sitúa en 1.297.

La CHE ha constatado que "la evolución de los caudales circulantes en el río Ebro en Tortosa parece indicar una tendencia a una disminución en los últimos años". Ello "se debe fundamentalmente al incremento de los usos del agua" --el regadío en la cuenca pasó de 400.000 a 750.000 hectáreas en medio siglo-- y en la que puede influir el aumento de la superficie forestal y su densidad.

 

  Fuente: El Periódico de Aragón

Troposfera.org declina cualquier responsabilidad sobre el contenido de las noticias que reproduce de otras fuentes, las cuales, por supuesto, son siempre citadas. No obstante, todo comentario que se quiera hacer llegar sobre las mismas, es siempre bien recibido.