Al respecto, el ministro Mañalich, precisó que gracias a este traspaso (que rige el 1 de enero) las funciones de monitoreo y de fiscalización no estarán en la misma institución, quedando la inspección en manos de la Seremi de Salud y el monitoreo a cargo del Ministerio del Medio Ambiente.
Mañalich dijo que a partir de esta año se agregarán las variables epidemiológicas al modelo predictivo.
Hemos elegido algunos hospitales de la Región Metropolitana que tienen estadísticas en línea y muy confiable para conocer (fundamentalmente durante el invierno) el número de consultas por patologías respiratorias de niños y adultos mayores de 65 años y también la tasa de hospitalización que están teniendo, expresó.
El secretario de Estado añadió que en el caso de superar ciertos umbrales, esto será informado a la intendencia respectiva de cada región, de manera tal, que pueda, aún no alcanzando niveles objetivos de riesgos informados por unidades de monitoreo, decretar una alerta que permita tomar medidas que nos ayudan a prevenir el impacto de estas condiciones medioambientales en los niños y en los adultos mayores.
Existen 28 estaciones de monitoreo en el país, 12 en la Región Metropolitana (Independencia, La Florida, Las Condes, Santiago, Pudahuel, Cerrillos, El Bosque, Cerro Navia, Puente Alto, Talagante y Quilicura) y 16 en el resto del país (Andacollo, Cuncumen, Los Andes, Viña del Mar, Rancagua, Rengo, San Fernando, Chillán, Concepción, San Pedro, Temuco, Osorno, Valdivia y Coyhaique).
En todas las estaciones de monitoreo se miden los contaminantes del aire regulados: material particulado fracción 10 micrones (MP10); material particulado fracción 2.5 micrones (MP 2.5); monóxido de carbono; oxidantes fotoquímicos expresados como ozono; dióxido de azufre; óxidos de nitrógeno y plomo.
Adicionalmente se miden condiciones meteorológicas, tales como temperatura, humedad y dirección de los vientos.
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