Categories: Noticias Ambientales
      Date: jun  1, 2005
     Title: Guadalajara: Ecologistas alertan de los niveles de ozono
Ecologistas en Acción ha alertado que los niveles de ozono troposférico en la provincia han aumentado este pasado mes de mayo y que se mantendrán así durante el resto de la temporada estival.

Ozono Guadalajara

01/06/05- La Crónica de Guadalajara

Ecologistas en Acción de Guadalajara ha comenzado a realizar un seguimiento pormenorizado de los niveles de ozono troposférico, a través de las dos estaciones que la Red de Control y Vigilancia de la Calidad del Aire de la Consejería de Medio Ambiente dispone en esta provincia: Guadalajara y Azuqueca de Henares.

Los verdes esperan que la población se conciencie y tome medidas, ya que un aumento significativo de este contaminante puede acarrear problemas en el aparato respiratorio.

Según los datos de las citadas estaciones, desde el pasado 16 de mayo de 2005, se han superado los umbrales de protección a la salud en 120 microgramos por metro cúbico durante ocho días, en diferentes franjas horarias, sobre todo entre las 13:00 y las 20:00 horas, tanto en Guadalajara como en Azuqueca. Asimismo se ha dado un caso de superación del Umbral de Información a la población el pasado martes 24 de mayo, entre las 14:00 y las 15:00 horas en Guadalajara.

"Estas cifras demuestran una año más que nuestra calidad de vida durante los meses estivales se verá mermada por los graves problemas de salud que conlleva la respiración de ozono troposférico", han declarado los verdes.

El año pasado Azuqueca superó los umbrales de ozono en seis ocasiones, una de ellas de alerta. Guadalajara durante 2004 registró tres superaciones de este umbral. Ecologistas en Acción considera que "se debería registrar e informar de las superaciones del umbral de protección a la salud, superado prácticamente todos los días desde mayo hasta septiembre, ya que es el responsable de muchas enfermedades de las vías respiratorias".

Ecologistas en Acción ha solicitado mantener una reunión con la concejala del Ayuntamiento de Guadalajara, Araceli Martínez, para trasladarle su preocupación y solicitar que se establezca el dispositivo informativo que se desarrollo el año pasado y que se incluyan en los paneles informativos de Guadalajara los datos del ozono troposférico, y se relance la campaña informativa para que la población tenga constancia de este fenómeno y tome las medidas preventivas para evitar que se superen los umbrales, así como para evitar la inhalación de este gas en caso de superaciones.

¿Qué es el ozono troposférico?

El ozono troposférico es un contaminante de los conocidos como secundarios. Se genera gracias a la presencia de otros contaminantes en la atmósfera, principalmente óxidos de nitrógeno. Estos compuestos reaccionan entre sí en presencia de la radiación solar, con temperaturas elevadas, propias de los meses de verano.

El aparato respiratorio es el mayor perjudicado por las altas concentraciones en el aire ambiente, aunque la afección a las personas, y por lo tanto los síntomas que se experimente, depende de la distinta sensibilidad de estas al contaminante y del nivel y tiempo de exposición. Un aumento de las concentraciones normales de ozono puede afectar a las personas provocando diferentes síntomas, aunque normalmente, los mismos difícilmente se distinguen de otras perturbaciones generales del estado de la salud generadas por otras causas.

Los primeros síntomas se traducen en problemas respiratorios y empeoramiento del asma, pudiendo producirse ligeras irritaciones de las mucosas del sistema respiratorio que provocan tos y garganta seca. El aumento de las concentraciones puede llegar a provocar un empeoramiento de la función pulmonar, malestar general, dolor de cabeza, disminución del rendimiento...

¿Cómo se disminuye ?

Una vez producido el episodio de ozono, las posibilidades de conseguir una reducción significativa a corto plazo, adoptando medidas correctoras, son mínimas, dadas las reacciones que provocan y la propia inercia de las mismas. Sin embargo, si es posible adoptar ciertos hábitos por parte de la población, que lleven a la prevención de los niveles alcanzados.

Las medidas a llevar a cabo son: usar medios de transporte colectivos o no contaminantes; ahorrar energía en el hogar y en el trabajo, utilizando de manera moderada el aire acondicionado; evitar la realización de actividades que puedan emitir compuestos orgánicos volátiles como la utilización de pinturas y disolventes que no sean acuosas, el repostaje de vehículos...; realizar un mantenimiento correcto de los vehículos y disponer en los mismos de un catalizador regulador para disminuir la emisión de hidrocarburos y de óxidos de nitrógeno.