Asimismo, el PNUMA ha destacado que el freón "es uno de los responsables de la destrucción de la capa de ozono", por lo que ha insistido en que debe cesar su utilización antes del año 2010, según recoge el Protocolo de Montreal que permanece en vigor desde 1989 y que pretende eliminar el uso de las sustancias perjudiciales para el Medio Ambiente.

Este programa además de erradicar el uso de esta sustancia en las neveras, también pretende difundir el uso de las tecnologías alternativas en la región de Las Tunas de Cuba.

Por este motivo, Palma indicó que estas actividades comprenden actuaciones como la creación de talleres y conferencias para promover el uso de sustancias sustitutivas del freón como refrigerante de las neveras.

Por otro lado, el programa del PNUMA ha procedido al montaje de una red de recuperación y reciclaje de esta sustancia contaminante compuesta por 70 máquinas de recogida y seis de reciclaje de refrigeradores.

Los puntos de recogida y de reciclaje están repartidos a lo largo de las 14 provincias cubanas y tiene el objetivo de reducir los riesgos provocados por el freón, prolongando así la vida útil de los refrigeradores y evitando las emisiones de este gas a la atmósfera.

Las 70 máquinas de recuperación se encuentran en las capitales de provincias y en los municipios de mayor importancia. En cambio, los mecanismos de reciclaje se han situado en las ciudades de Pinar del Río, Camagüey, La Habana, Santa Clara, Holguín y Santiago de Cuba, con el objetivo de reciclar 49 toneladas de freón anuales en todo el país.