Fuente: Finanzas.com
Categories: Noticias Ambientales
Date: jul 7, 2005
Title: Químicas de Huelva invierten 66 millones en mejoras medioambientales
La Asociación de Industrias Químicas y Básicas de Huelva (AIQB), compuesta por 15 empresas asentadas en el Polo Químico onubense, invirtió 66 millones de euros para mejoras medioambientales durante 2004, lo que supuso un incremento del 210 por ciento respecto al presupuesto destinado a este fin en 2003.
Según informó el gerente de AIQB, Manuel Díaz del Valle, durante la presentación de la VIII Memoria Medioambiental de la Asociación, con estas inversiones, se ha conseguido reducir las emisiones a la atmósfera y a la ría de la capital onubense y alcanzar el primer puesto en calidad de aire en Andalucía, mediante las inversiones "más elevadas realizada en una sola anualidad por el conjunto de la industria química y básica onubense".
En este sentido, destacó que la media de las inversiones medioambientales de los últimos cinco años se sitúa en 38 millones de euros, acumulando una inversión de 258 millones de euros desde que se inició la publicación de esta memoria, en 1997 y destacó, en 2004, los proyectos de eliminación de incidentes ambientales en una planta con 'vertido cero' al medio receptor y la reducción de la carga orgánica de efluentes mediante un tratamiento orgánico como los "más importantes" llevados a cabo en el último año.
Díaz del Valle explicó que las industrias continúan la tendencia de reducir las emisiones de compuestos como el dióxido de azufre, con un descenso del 14 por ciento y de un diez por ciento en partículas. En el caso del dióxido de nitrógeno, se ha logrado una reducción del 47 por ciento entre 1997 y 2004, con lo que las emisiones de la industria el año pasado fueron casi la mitad de las que se producían hace ocho años.
El resto de las emisiones representativas de la actividad industrial, como el dióxido de nitrógeno y el sulfuro de hidrógeno también presentaron resultados "positivos", ya que en ambos casos se alcanzaron los índices más bajos que permite la tecnología disponible.
En cuanto a los vertidos hídricos a la ría, se concretó una reducción del 14 por ciento en relación a 2003, debido, fundamentalmente, al descenso de las precipitaciones y a la puesta en marcha de nuevos procesos de reutilización de los efluentes.
En cuanto a calidad del aire, Díaz del Valle señaló que, según los datos de la Consejería de Medio Ambiente, en 2004, Huelva fue la capital andaluza con mayor porcentaje de calificaciones globales buenas o admisibles, con un 87,7 por ciento, por un 12,3 por ciento de calificaciones malas o muy malas, con lo que Huelva continúa su tendencia de los últimos cinco años de mantener el primer o el segundo puesto en la mejor calidad del aire de Andalucía.
De la misma forma, destacó la evolución de los siete años de operación del proyecto de reordenación de los vertidos de fosfoyesos, concluyendo que ha sido uno de los "grandes logros" del Plan Corrector de Vertidos Líquidos a la ría de Huelva, que garantiza la ausencia de vertidos líquidos al exterior y descarta la posible incidencia de radioactividad natural del fosfoyeso sobre el entorno.
"Buenos resultados"
Por su parte, la directora general de prevención y calidad ambiental de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Esperanza Caro, destacó los "buenos resultados" obtenidos por la industria onubense por sus inversiones medioambientales y respaldó su objetivo de que "el desarrollo de la industria no es posible sin un desarrollo sostenible y respetuoso con el medio ambiente".
Caro subrayó el esfuerzo realizado por las empresas para adaptarse a la "amplia" normativa actual sobre el aire, el agua y el suelo y aplaudió el compromiso de la industria por "adelantarse a las exigencias futuras en materia medioambiental".
"La industria cumple"
El presidente de la AIQB, Jesús Contreras, por su parte, concluyó que, según esta Memoria, "la industria cumple y lo hace como consecuencia de un compromiso con el desarrollo sostenible asumido como meta por cada una de las empresas".
A su juicio, la industria de Huelva "hace mucho tiempo que dejó de ser un problema para la ciudad y se convirtió en una garantía de futuro, de equilibrio sectorial, de desarrollo económico y de puestos de trabajo porque el esfuerzo de las industrias y de las administraciones ha transformado la convivencia entre Huelva y la industria, conduciéndola por los cauces adecuados".
En este sentido, hizo un llamamiento sobre "el daño que se le está haciendo a Huelva, tanto interno, porque se pretende dividir a la sociedad, como externo, porque se contribuye a transmitir fuera de la ciudad una imagen que no se corresponde con la realidad en relación a la actividad industrial".