Así lo recoge el informe anual de la asociación ecologista sobre la calidad del aire, que recopila datos de las once estaciones de control gestionadas por el Gobierno regional e incluye, por primera vez, la información recogida en la estación de medición situada en el puerto de Santander, cuyo titular es la Autoridad Portuaria.
Según afirma EAC en nota de prensa, los datos aportados por la estación de medición del puerto, situada en las dársenas de Raos, «evidencian un problema que está afectando a la calidad del aire del área industrial de la Bahía de Santander».
La asociación achaca esta situación al «elevado» tráfico de vehículos pesados y de coches que transitan el nudo del enlace de Raos, entre la S-20 y la A-67, el «cada vez mayor» tráfico aéreo del aeropuerto de la ciudad y a los trenes de mercancías.
Por ello, opina que la «influencia» de los buques que transportan coches y de los graneleros «puede quedar difuminada en su contribución a los altos niveles de contaminación», pese a que emitan gases «en todo momento mientras permanecen atracados, al no estar equipados con motores eléctricos«.
La asociación ha señalado que , «a todo ello», habría que añadir el «continuo» movimiento de coches de embarque y desembarque en los muelles, «con una media de dos buques diarios de lunes a viernes, que pueden transportar entre 500 y 600 coches», así como las industrias siderúrgica y química de Santander, Astillero, Camargo y Marina de Cudeyo.
EAC ha afirmado que, como consecuencia de esta situación, 365.000 cántabros, el 63% de la población, respira un aire perjudicial para la salud según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, lo que, a su juicio, «con seguridad irá a más en los próximos años».
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