Categories: Noticias Ambientales
      Date: may 25, 2018
     Title: Avilés: el Principado desmiente las alertas lanzadas esta semana por el CEA sobre la contaminación por benceno

Ni hubo picos de contaminación de benceno ni mucho menos una media superior a la permitida por la legislación española. Así lo afirma la consejería de Medio Ambiente del Principado que ayer trasladó las mediciones de diversas estaciones de Avilés el pasado martes y miércoles. Según estos documentos, el pico de benceno del que alertaba el Colectivo Ecologista de Avilés no habría existido.



Los ecologistas denunciaron mediciones de 155 microgramos por metro cúbico mientras en la información facilitada por el Principado la medición máxima captada por la estación de Llaranes alcanza los 6,14 a las nueve de la mañana. La sustancia contaminante que mayores cotas alcanza es la PM10, es decir, aquellas partículas con diámetro inferior a diez micras. En este caso, en Llaranes se llegó a un máximo de 65 microgramos por metro cúbico, también a las nueve de la mañana. Según la normativa europea, el valor límite diario para la protección de la salud humana es de cincuenta en veinticuatro horas, por lo que este límite sí fue superado al alcanzarse los 51.

Por contra, el miércoles tanto el benceno como el PM en Llaranes estuvieron mucho más contenidos. Respecto a las mediciones de benceno en la zona del Quirinal, que los ecologistas habían situado en 122, no ofrecieron ningún dato.

Una plataforma vecinal de Gijón pide que se regule el material particulado sedimentable

La Plataforma Contra la Contaminación en Gijón, liderada por el movimiento vecinal, se ha sumado a la campaña iniciada por la Coordinadora Ecologista de Asturias para reclamar al Principado que regule los niveles de contaminación por partículas sedimentables. Este tipo de contaminación afecta especialmente a barrios próximos a las zonas de acopio de graneles sólidos.

La campaña consiste en el envío a la Consejería de Medio Ambiente de una petición para que se regule en Asturias ese tipo de contaminación, como ya se ha hecho en otras comunidades autónomas, como Cantabria, País Vasco y Andalucía.

Las mediciones realizadas por el Principado en el año 2017 arrojaron niveles de 827 miligramos por metro cuadrado al día de material sedimentable en Jove, en el mes de noviembre de aquel año, y de 645 miligramos por metro cuadrado y día en El Lauredal, en diciembre de aquel año. Su falta de regulación, señalan desde la plataforma, hace que no se puedan tomar medidas al respecto.

Las partículas sedimentables, por su mayor tamaño, son menos nocivas para la salud humana que las PM 10 y las PM 2,5, pero existe el riesgo indirecto de que pasen a la cadena alimentaria.

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