«Hemos detectado altos valores de benceno en las piscinas de Trubia», reconoció Fernández. Por ello, el Principado ya había pedido a las empresas que tomasen medidas «con carácter inmediato», algo que comenzaron a hacer a principios de año. Los análisis técnicos, para los que la consejería contó con el asesoramiento de una empresa externa, han determinado que la «causa principal» del benceno disperso por el aire trubieco «corresponde a las instalaciones de Química del Nalón y en menor medida Industrias Doy. Surgen en procesos de almacenamiento, trasiego y manipulación de alquitranes».
Los vecinos de Trubia denuncian desde hace meses el exceso de benceno, al igual que la Coordinadora Ecoloxista d'Asturies. Esta última insiste en la alta frecuencia de picos de contaminación por encima de lo que marcan las recomendaciones de la OMS y en que el benceno es cancerígeno.
El Principado propone ahora un plan de acción de veintiséis medidas preventivas para mejorar la calidad del aire, de las cuales «muchas ya se están implantando», subrayó Fernández. El documento se somete desde hoy a información pública y hasta el 21 de junio para recibir aportaciones. De los 4,7 millones totales de inversión, 4,3 corresponden a Química del Nalón, 245.000 a Industrias Doy y el resto al Principado.
Las medidas
Química del Nalón está implementando sus medidas en dos fases. La primera finalizará en septiembre. Hay medidas, como el empleo de columnas de lavado de gases mediante aceites, que ya se han tomado. La segunda fase tiene como fecha límite el 1 de diciembre de 2018. Para entonces la empresa contará con un oxidador térmico, que costará 1, 7 millones de euros y, en palabras de Fernández, es una tecnología que todavía «hay que diseñar, encargar e instalar».
«Nos sentimos responsables y comprometidos con la calidad del aire, nuestros empleados y los ciudadanos. En cuanto al plan va progresando de acuerdo a lo esperado», declaró el director industrial de Química del Nalón, Javier Fernández. Sobre las medidas que sugiere el Principado, pidió «tiempo para estudiarlas», aunque concedió que están de acuerdo con el planteamiento del Principado.
En cuanto a Industrias Doy, detalló la consejera, «ha aplicado medidas de cubrición de las balsas de decantación de alquitrán, de cierre hidráulico del depósito de estos productos y tiene encargado un soplante, que es eficaz de cara a la resolución de este problema». La empresa cuenta con tener instalado este último dispositivo en diciembre.
Por último, la consejería destinará 15.000 euros a vigilancia de las emisiones de Industrias Doy, 12.000 para mediciones durante el verano y 25.000 euros para estudios que comprueben la eficacia del plan propuesto. Además, otorgará 120.000 euros en subvenciones para modernizar calefacciones domésticas de carbón en Trubia, a pesar de que se considera «poco significativa» la contaminación emitida por esta vía, como también por la del tráfico rodado.
El alcalde de Oviedo, Wenceslao López, realizó una «valoración positiva» del trabajo de análisis y propuestas de la Consejería. También alabó, de las industrias, el «compromiso de acabar y completar el proyecto. Habrá que verificarlo y hacer un seguimiento cercano».
López dejó la puerta abierta a la posibilidad de que el Ayuntamiento presente alegaciones al plan regional: «Tenemos que analizarlo y estudiarlo y si podemos colaborar en mejorarlo, adelante; para eso es».
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