Categories: Noticias Ambientales
      Date: jun 14, 2005
     Title: Quejas e infracciones de Legislación de Medio Ambiente en la UE
Según un informe de la Comisión Europea, más de la tercera parte de las quejas y casos de infracción de la legislación de la UE están relacionados con el medio ambiente

Quejas Medio Ambiente

14/06/2005

El texto señala que los ciudadanos desempeñan un papel importante en la supervisión de la actuación de los gobiernos nacionales en materia medioambiental, y afirma que la prioridad del comisario del ramo, Stavros Dimas, es que los habitantes de la UE disfruten de un entorno medioambiental 'seguro y agradable' al mismo tiempo que aboga por una simplificación y modernización de la legislación.

Según el informe de la Comisión Europea, la mayoría de los casos en los que los Estados miembros no aplican correctamente la legislación medioambiental de la UE se encuadran en cuatro áreas: la protección de la naturaleza, la gestión de residuos, el agua, y la evaluación del impacto medioambiental.

Sin embargo -recoge el texto- más del 50% de los casos en que los gobiernos no han comunicado a la Comisión Europea sobre el proceso de transposición de la legislación europea están relacionados con el sector del aire. Entre 2001 y 2003, los Estados miembros tuvieron que transponer a su legislación nacional 13 directivas distintas relativas a este sector.

La base legal da derecho a la Comisión Europea a actuar contra los Estados miembros que incumplan sus obligaciones de transposición para que apliquen correctamente el derecho comunitario (artículo 226 del Tratado). Según éste, si la Comisión estima que un Estado miembro ha incumplido una de las obligaciones que le incumben en virtud del presente Tratado, emitirá una carta de emplazamiento -primera advertencia por escrito-, en la que concede al país en cuestión un plazo de al menos dos meses para ofrecer una explicación.

Así las cosas, si el Estado miembro no responde o su respuesta no es satisfactoria, la Comisión transmite un dictamen motivado, que es una advertencia ulterior en la que expone de forma detallada los motivos de la reclamación y ofrece nuevamente al país afectado un plazo para conformarse con las disposiciones del derecho comunitario.

Sólo una vez agotados estos pasos, el caso llega al Tribunal Europeo de Justicia, donde los jueces deciden si se ha producido una contravención de los Tratados y, en tal caso, se ordena al país infractor que adopte las medidas necesarias para remediar esta situación.

Ahora bien, si el Estado miembro infractor no acata la resolución del Tribunal de Luxemburgo, en virtud del artículo 228 del Tratado y, tras una segunda ronda de advertencias, la Comisión puede volver a remitir el caso al Tribunal para que imponga una multa.

Concienciación ciudadana

Además de los controles por parte del Ejecutivo, la Comisión Europea estima que los ciudadanos europeos y las ONG dedicadas al medio ambiente desempeñan un 'papel importante en la supervisión de la actuación de los gobiernos locales y en alertar a la Comisión sobre la existencia de cualquier problema potencial'.

De hecho, cualquiera puede presentar una reclamación contra un Estado miembro en relación con cualquier ley, reglamento, medida y práctica administrativa que entre en conflicto aparente con la legislación de la UE.

Asimismo, los Estados miembros pueden presentar reclamaciones contra otros países de la UE, aunque tienen que acudir primero a la Comisión.

Por su parte, el comisario de medio Ambiente, Stavros Dimas, aboga por hacer de la aplicación de la legislación una de las principales prioridades en política medioambiental, con el fin de que los ciudadanos disfruten del 'entorno seguro y agradable que merecen'.

Dimas ha propuesto el aumento de la cooperación con los Estados miembros y de la asistencia técnica como factor clave para resolver los problemas de incumplimiento. En su opinión, la Comisión necesita colaborar con los Estados miembros para comprender y resolver mejor los problemas que plantea la aplicación del derecho comunitario. Según el comisario, este es el modo para que la aplicación y la prevención vayan de la mano en pos del objetivo último: contar con una política medioambiental efectiva.

Consecuencias de la ampliación

Pero si los posibles incumplimientos en la transposición de directivas pueden suponer un problema para cumplir con la legislación medioambiental, para los miembros de la comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo también podía serlo la ampliación a 25 de la UE.

El año pasado, algunos miembros de esta comisión expresaron su preocupación por la posibilidad de que la ampliación de la Unión trajera consigo un incremento del número de quejas por incumplimiento del derecho comunitario, lo que podría haber desbordado la capacidad de tramitación de casos de la Comisión. En aquel momento, la comisario del ramo, Margot Wallström, prometió examinar la situación. A día de hoy, se puede afirmar que desde la ampliación no se ha producido un aumento drástico del número de reclamaciones recibidas.

Según los datos del Ejecutivo comunitario, los países de la antigua UE de los Quince también han mejorado su actuación en este ámbito, aunque persisten algunos problemas.

 

Fuente: Empresa Sostenible